Ciencia Nueva. Revista de Historia y Política | e-ISSN 2539 - 2662

Vol. 8 Núm. 2 | Julio - diciembre de 2024 - Pereira, Colombia





PRESENTACIÓN

DOI: https://doi.org/10.22517/25392662.25740 - pp 1-5



Repensando lo local y lo global: las múltiples escalas de la historia


Presentación del Número | Vol. 8 Núm. 2




La historia no solo se escribe desde los grandes centros de poder. Las periferias, los márgenes y las comunidades locales desde su complejidad también reflejan los grandes movimientos del mundo. En esta edición de Ciencia Nueva. Revista de Historia y Política, exploramos cómo lo global y lo local dialoga, influyéndose mutuamente, tejiendo narrativas que nos ayudan a comprender las dinámicas del pasado y su relevancia en los debates contemporáneos.


La relación entre lo global y lo local no es lineal ni uniforme. Se trata de una interac-ción constante y dinámica, donde las decisiones y fenómenos que ocurren a gran escala en-cuentran eco, resistencia o adaptación en las realidades particulares de las comunidades. En este sentido, estudiar estas intersecciones permite desentrañar la forma en la que los aconteci-mientos, comunidades y actores locales contribuyen, resisten o moldean las fuerzas globales. Este enfoque nos invita a reconocer que los procesos históricos no se limitan a las grandes narrativas, sino que están tejidos por innumerables hilos de experiencias, conflictos y adapta-ciones en contextos diversos. Así, la historia se revela como un campo de tensiones en el que lo global no puede comprenderse sin lo local, y lo local encuentra sentido en su conexión con el mundo.


La interconexión entre las dinámicas locales y globales fue planteada por el argentino Sergio Serulnikov, para quien es imposible comprender las historias nacionales de América Latina sin considerar las influencias transnacionales1. Por su parte, Hugo Fazio Vengoa y Lu-ciana Fazio Vargas exponen sobre la prominencia del eje local-global en las ciencias sociales contemporáneas. Destacan la forma en la que las trayectorias históricas se entrelazan en un contexto de globalidad, generando resonancias y sincronizaciones que transforman las métri-cas de tiempo y espacio2. Estos autores latinoamericanos subrayan que el binomio, local-glo-bal, no es simplemente una nueva moda intelectual, sino un cambio epistemológico que exige repensar las categorías convencionales de las ciencias sociales y sus jerarquías espaciales y temporales.


Estas miradas pueden ser enriquecidas y matizadas al abordar críticamente el concep-to de escala como una herramienta metodológica que estructura la relación entre lo local y lo global. A nuestro modo de ver, desde esta perspectiva, las escalas (local, nacional, regional, global) no deben interpretarse como entidades ontológicas preexistentes, sino como cons-trucciones metodológicas utilizadas para analizar la complejidad de las relaciones sociales. Estas escalas, más que reflejar realidades fijas, emergen del ejercicio del poder que organiza el espacio y establece jerarquías entre lo que se considera «local» y «global». En este sentido, lo «local» no carece de poder ni de significado intrínseco, sino que su definición es producto de dinámicas de dominación, marginalización y resistencia.


El énfasis en las historias transnacionales conectadas o cruzadas, como lo menciona Serulnikov, puede ser visto como un intento por superar las limitaciones de las historias glo-bales tradicionales3. Sin embargo, aquí reside una paradoja: al destacar las conexiones entre lugares y escalas, se corre el riesgo de obviar las desigualdades estructurales y las especificida-des locales que subyacen a estas relaciones. Por ejemplo, si bien es cierto que las influencias transnacionales han sido fundamentales para configurar las historias nacionales de América Latina, también es crucial reconocer cómo estas influencias son filtradas, adaptadas o resisti-das por actores locales que ejercen poder en sus propios contextos.


Si se argumenta que estas escalas son en realidad herramientas metodológicas cons-truidas para interpretar relaciones sociales y no categorías intrínsecas a los procesos histó-ricos, ¿es posible refutar la idea de una interconexión local-global como una condición on-tológica o inevitable? La propuesta de Fazio sobre el eje local-global como un vector que trasciende las esferas sociales y permite integrar múltiples dimensiones espaciales y tempora-les puede enriquecerse al reconocer que estas configuraciones no son neutrales. Al contrario, son moldeadas por el poder que estructura los espacios y tiempos. Desde esta perspectiva, el eje local-global, más que reflejar una realidad objetiva, expone una forma de analizar cómo las dinámicas sociales y las narrativas históricas son atravesadas por fuerzas de poder que jerarquizan y ordenan el espacio. En este sentido, las escalas no son más que un lente que permite explorar las conexiones, tensiones y exclusiones que articulan las relaciones sociales.


La historia global no debe asumirse como una explicación única de la realidad social, pues las metodologías multiescalares que combinan lo local, transnacional y global ofrecen un enfoque más robusto para capturar la complejidad de las transformaciones sociales4. Por lo tanto, argumentar que lo global y lo local se entrelazan de manera compleja es solo una parte de la historia. La mediación de estas escalas a través del poder y las prácticas sociales es lo que realmente define las relaciones entre ellas. Desde esta perspectiva, la historiogra-fía podría centrarse no solo en mapear las conexiones transnacionales, sino en desentrañar cómo las acciones y decisiones locales reconfiguran esas influencias externas y construyen narrativas históricas únicas. Así, en lugar de considerar lo local como una escala dependiente o subalterna, podemos verlo como un espacio donde el poder y la agencia se manifiestan de manera igual de significativa que en las escalas más amplias.


Esta reflexión nos lleva a reconocer que «el giro global»5 no es suficiente para abor-dar la complejidad de las historias latinoamericanas, pues las narrativas transnacionales no pueden eludir las dinámicas de poder que estructuran las relaciones entre escalas. En última instancia, el desafío historiográfico radica en encontrar formas de analizar estas interacciones que no subordinen las escalas unas a otras, sino que las interpreten como espacios donde el poder y la agencia se despliegan en múltiples direcciones. Así, mientras algunos autores como Fazio o Serulnikov enfatizan la necesidad de superar las divisiones jerárquicas entre escalas, nosotros buscamos poner el énfasis en que el poder es el elemento transversal que estructura estas relaciones y complejiza las miradas sobre los espacios, tanto locales como globales. Por ello, es crucial reconocer las conexiones entre escalas y también analizar críticamente cómo son producidas y sostenidas por dinámicas de poder históricas y contemporáneas.


Tras esta disquisición sobre las múltiples escalas que estructuran y complejizan nues-tra comprensión del pasado, pasamos a mencionar el contenido del segundo número del vo-lumen 8 de Ciencia Nueva. Cada uno de ellos ilustra, desde distintas perspectivas y contextos, cómo lo global y lo local se entrelazan en un tejido histórico diverso y dinámico. Estas contri-buciones permiten explorar desde disputas diplomáticas en Paraguay hasta debates sobre el federalismo en tiempos de Bolívar, ofreciendo nuevas interpretaciones que amplían nuestra visión de la historia del mundo que habitamos.


La sección Estudios históricos la abre uno de los temas más sugerentes de este número, como lo es la compleja relación entre diplomacia y poder. En «De superior a superado: egos, deslealtad y lucha de poder entre dos diplomáticos franquistas en el Paraguay de Stroessner (1954-1958)», Eduardo Tamayo Belda analiza el enfrentamiento entre José González de Gregorio Arribas y Ernesto Giménez Caballero, dos representantes del régimen franquista en Paraguay. Este estudio, basado en documentación diplomática y prensa de la época, revela las intrigas y tensiones internas en la legación española, que culminaron con la salida deshonrosa de González de Gregorio y el ascenso de Giménez Caballero.


Por otro lado, Julio César Abanto Chani revisa las dinámicas económicas y políticas que rodearon al gobierno de Francisco García Calderón en «Intereses salitreros, intervención extranjera y fractura del civilismo: Formación, ascenso y caída del gobierno de Francisco García Calderón (1881-1883)». A través del análisis de las tensiones en torno a la industria salitrera y las intervenciones de Estados Unidos y Francia, el autor destaca las influencias externas en la configuración de las estrategias de García Calderón y, finalmente, su destierro.


En un contexto más contemporáneo, la sección Ciencia política la compone el artículo «Examining the Energy-Water Nexus in Hydroelectric Conflicts: A Global Analysis», de José Antonio Peña-Ramos, Miguel Borja Bernabé-Crespo y Chiara Olivieri, aborda las disputas globales en torno a las centrales hidroeléctricas entre 1957 y 2018. Este estudio demuestra de qué forma estas instalaciones se convierten en puntos estratégicos de conflicto por el control del territorio y los recursos hídricos, enfatizando su papel en la agenda de sostenibilidad de la ONU para 2030.


Por su parte, la sección Historiografía y teoría política la abre el trabajo de Edwin Cruz Rodríguez quien reflexiona sobre las ideas de Simón Bolívar respecto al federalismo en su artículo «Bolívar y el federalismo». A través de un enfoque pragmático, el autor examina el rechazo de Bolívar de esta forma de gobierno al considerarla incompatible con las condiciones políticas y sociales de América hispana tras la independencia, destacando los riesgos de disensión interna y la falta de virtudes políticas necesarias en la región.


Para el ámbito de las disputas territoriales, Sofía Lara Largo, en «Pleitos, acuerdos y bifurcaciones identitarias en las tierras de Santa Ana de Guamal, Colombia», investiga un conflicto familiar por derechos de propiedad en una finca ubicada en tierras de resguardo. Basada en fuentes documentales y trabajo de campo, la autora analiza cómo las disputas locales se expanden hacia cuestionamientos más amplios sobre identidades étnicas y derechos territoriales, en un proceso que trasciende la microescala.


De igual manera, Cristina Barreiro Gordillo explora el papel de la prensa internacional en «La imagen en la memoria: corresponsales extranjeros en Madrid durante la Guerra Civil». Este artículo se enfoca en las narrativas visuales y textuales que los corresponsales extranjeros construyeron sobre el conflicto español, modelando la percepción global de esta guerra en un momento crucial del siglo xx.


Para cerrar la sección, Jairo Antonio López Pacheco aporta el texto «Norbert Elias y la imaginación metodológica en la sociología histórica». Analiza la integración de diferentes dimensiones temporales y sociales de acuerdo con el enfoque histórico-procesual de Elias. Este artículo destaca la creatividad metodológica de Elias, especialmente en el uso de fuentes y el análisis de procesos sociales a largo plazo.


En la sección de reseñas, José María Navarro analiza el libro de Anne Staples, «¿Dónde estás?, ¿qué haces, Leona Vicario?». Esta obra, dedicada a una de las figuras más importantes de la independencia mexicana, ofrece un enfoque innovador para comprender su vida y legado, enriqueciendo las perspectivas sobre el papel de las mujeres en este periodo histórico.


La última sección de la revista es la de Anales, un espacio muy importante que aprovechamos para la publicación de textos originales de valor patrimonial, cultural, histórico o social. En esta ocasión traemos la transcripción de dos documentos para la historia de Santa Rosa de Cabal. Primero, el Informe de Jorge Juan Hoyos Cabal al Presidente de la República; y segundo, el Decreto de Nueva Población de Cabal, ambos de 1844. Estos documentos son testimonio del proceso de consolidación territorial y estatal que enfrentó la República de la Nueva Granada en la segunda mitad del siglo xix. Aunque este territorio se pobló principalmente con migrantes antioqueños en el contexto de la colonización antioqueña, los documentos analizados revelan un esfuerzo conjunto entre actores locales, regionales y estatales para organizar la frontera norte del Cauca. El informe resalta las condiciones geográficas y económicas del sitio, mientras que el decreto establece las bases jurídicas para la distribución de tierras, el ordenamiento territorial y la relación entre los pobladores y el Estado. Ambos textos, conservados en el Archivo General de la Nación son fundamentales para entender la fundación de Santa Rosa de Cabal y también para analizar las estrategias implementadas por el Estado neogranadino para consolidar su presencia en las fronteras interiores. Trazan un modelo de expansión territorial que sentó las bases para la configuración del espacio que actualmente se reconoce como la región del Eje Cafetero colombiano.


Como se puede ver, en este número de Ciencia Nueva, hemos abordado una amplia selección de temas que ejemplifican la complejidad y diversidad de las interacciones entre lo global y lo local. Los artículos que lo integran profundizan en los desafíos del pasado e invitan a cuestionar y rediseñar las categorías con las que analizamos los procesos históricos. Cada contribución demuestra cómo las dinámicas locales se articulan con fuerzas globales y cómo estas interacciones están moldeadas por el poder y la agencia de los actores involucrados. En un mundo donde las fronteras entre lo global y lo local se vuelven cada vez más difusas, los textos reunidos en este número subrayan la importancia de aproximarse a la historia y la política desde una perspectiva crítica y multiescalar. Este enfoque amplía nuestra comprensión del pasado y refuerza nuestras herramientas teóricas y metodológicas para enfrentar los complejos desafíos del presente.


Como Editor de Ciencia Nueva, quiero expresar mi más profundo agradecimiento a la Vicerrectoría de Investigaciones, Innovación y Extensión de la Universidad Tecnológica de Pereira y a su Facultad de Educación, cuyo compromiso constante y apoyo financiero han sido fundamentales para la producción y continuidad de esta revista. Extiendo un reconocimiento especial a la Maestría en Historia y al equipo editorial, conformado por Michael Stiven Valencia Villa y Natalia García Mora, quienes, junto al personal técnico del Centro de Recursos Informáticos y Educativos, desempeñan una labor excepcional que garantiza la calidad y proyección de nuestra publicación. También agradezco a los autores que han contribuido con este número, tanto a quienes lograron la publicación de sus trabajos como a quienes postularon sus investigaciones para valoración; así como a nuestros lectores de diversas latitudes, quienes encuentran en Ciencia Nueva un espacio académico de excelencia para sus intereses y reflexiones. Su confianza y participación son esenciales para seguir fortaleciendo este proyecto como un referente en el ámbito académico.


Con esta edición, cerramos el año 2024 con la convicción de que explorar las conexiones entre lo global y lo local nos permitirá avanzar hacia una historiografía más crítica, inclusiva y en sintonía con los debates vanguardistas. Invitamos a nuestros lectores a reflexionar, debatir y, sobre todo, a seguir explorando las múltiples escalas que moldean nuestra visión del mundo.




1 Sergio Serulnikov, «El secreto del mundo: sobre historias globales y locales en América Latina», História da Historiografia: International Journal of Theory and History of Historiography 13, n.o 32 (2020): 147–184.


2 Hugo Fazio Vengoa y Luciana Fazio Vargas, «La historia global y la globalidad histórica contemporánea», Historia Crítica, n.o 69 (2018): 3-20, https://doi.org/10.7440/histcrit69.2018.01.


3 Serulnikov, «El secreto del mundo: sobre historias globales y locales en América Latina», 147.


4 Fazio Vengoa y Fazio Vargas, «La historia global y la globalidad histórica contemporánea», 6.


5 Serulnikov, «El secreto del mundo: sobre historias globales y locales en América Latina», 147.