Scientia et Technica Año XXVIII, Vol. 29, No. 03, julio-septiembre de 2024. Universidad Tecnológica de Pereira.
cuales van desde, casa habitación, hasta rascacielos, que
estructuralmente requieren del cuidado y determinación o
medición de las condiciones meteorológicas, para el adecuado
proceso constructivo y la culminación efectiva en tiempos y
formas que sean congruentes con lo planificado [3].
Los anemómetros son dispositivos esenciales utilizados
para esta tarea, y su calibración adecuada es de vital
importancia para garantizar mediciones precisas y consistentes
[4]. La estandarización de un anemómetro, que implica
determinar su curva de calibración, es un proceso crítico en el
aseguramiento de la fiabilidad y exactitud de los datos
recolectados [1] ya Pindado y colaboradores en 2014,
investigadores del Instituto IDR/UPM en Madrid España, han
reportado sus resultados experimentales sobre el
funcionamiento de anemómetros en la industria eólica y de las
variables específicas que afectan sus señales de salida durante
su monitoreo, para ello también los autores han aplicado
modelos matemáticos analíticos que estudiaron el
comportamiento de los componentes analizados en los
anemómetros monitoreados.
En este contexto, existen diferentes enfoques para la
estandarización de dispositivos cuando no hay datos del
proveedor o en la reparación o mantenimiento que se realiza,
sin embargo, en un ejercicio académico y de trabajo
colaborativo se han seleccionado el Método de Mínimos
Cuadrados y el Método de Diferencias Divididas de Newton.
Ambos métodos han demostrado su eficacia en la aproximación
y ajuste de curvas a datos experimentales, pero cada uno tiene
sus propias características y ventajas que deben ser analizadas
cuidadosamente para seleccionar el enfoque más adecuado para
este propósito específico. El presente artículo tiene como
objetivo comparar y evaluar el desempeño de estos dos métodos
en la estandarización de un anemómetro, destacando sus
aplicaciones, limitaciones y precisión en un rango de
condiciones experimentales. Para lograr este objetivo, se
consultaron algunas investigaciones y artículos científicos
publicados que abordan experimentos validados utilizando
estos métodos.
En 2012 Pacheco y Colaboradores, hablan de un modelo
no lineal combinado de interpolación de Lagrange y de
diferencias divididas de Newton con un procedimiento de alto
orden para la identificación de baja frecuencia en una
contingencia critica en un sistema eléctrico, con una aplicación
eficaz y la disminución del tiempo en la búsqueda de
parámetros críticos [5].
En el estudio realizado por Zhang y colaboradores en
2015, utilizan el Método de mínimos cuadrados para modelar el
pos procesamiento de datos de medición de campos
electromagnéticos haciendo énfasis a la capacidad de ajuste
flexible propia del método en la función de ponderación y tener
como lo relatan una buena estabilidad [6].
Mientras que, De Vicente y Oliva, y Sánchez, en 2016
utilizaron ajustes por medio del método de mínimos cuadrados
en el análisis de diversas aplicaciones en la metrología,
mostrando por ejemplo el caso de la utilización de un patrón de
calibración vertical usado en rugosímetros y microscopios, para
poder obtener el modelo que representaría la estimación de la
altura en la fecha actual por medio de la deriva anual [7].
Mohammed y Abood en reportaron en 2017 el uso
comparativo de estos métodos de interpolación y diferencias
divididas en un estudio acerca de la contaminación de suelos
por metales pesados en un campamento de personas
desplazadas en Irak, obteniendo un modelo matemático de alta
precisión, eficiente y rápido [8].
En adición, Azorin y colaboradores en 2018, de la
Universidad de Gothenburg, reportaron el uso de modelos
estadísticos para analizar y minimizar problemáticas con
relación a la afectación de anemómetros respecto al sesgo en la
detección y el almacenamiento de datos, lo cual es inherente a
el efecto del viento sobre los instrumentos de medición [4].
Para 2018 en un estudio realizado por Zhang y
colaboradores donde utilizan como base el método de mínimos
cuadrados, llevándolo a un método de mínimos cuadrados
recursivos ponderados desacoplados aplicado que estima por
separado parámetros de dinámica rápida y lenta de batería y su
sistema de gestión, haciendo un análisis de sus parámetros de
funcionamiento y generando un modelo que se pudiera simular
mejorando no solo la precisión sino también el rendimiento [9].
Otro estudio realizado por Wijaya y colaboradores en
2019 muestra la aplicación de interpolación de diferencias
divididas de Newton para optimizar el tiempo de
funcionamiento de una señal de tránsito hasta en 21.7% en una
intersección de alto flujo de automóviles en Yogyakarta [10].
En una aplicación ingenieril, Cantera Cantera y
colaboradores en 2019 para la estimación de parámetros del
algoritmo de control de un motor ultrasónico lineal (LUM) se
utilizó el método de mínimos cuadrados y mínimos cuadrados
totales con lo que se obtuvieron las leyes de control del LUM
para llevar a cabo tareas de seguimiento y regulación [11].
Para 2020, Tianqui y colaboradores, muestran el uso del
método de mínimos cuadrados haciendo un proceso de
truncamiento, recortando el método para poder evitar el error
del método ante valores atípicos en el proceso de medición de
una máquina de coordenadas utilizada en cilindros de acero
[12].
En este artículo, proponemos una comparación detallada
del Método de Mínimos Cuadrados y el Método de Diferencias
Divididas de Newton en la estandarización de un anemómetro.
Se llevó a cabo un experimento controlado en un túnel de
viento, utilizando un anemómetro digital calibrado y
condiciones de flujo, para obtener conjuntos de datos que
representen diversas situaciones experimentales. Estos datos
serán sometidos a ambos métodos, y se compararán los
resultados obtenidos para evaluar la precisión y la estabilidad
de cada método.
Este estudio proporcionó una visión integral de las
fortalezas y debilidades del Método de Mínimos Cuadrados y